El útero es el órgano que más cambia durante la gestación. Pasa de 60 gramos aproximadamente al inicio de la gestación, hasta llegar alcanzar los 1000g al final del tercer trimestre, cuando su tamaño es comparable al de una sandia.
En este momento llega hasta la parte inferior de la caja torácica.
Durante su crecimiento, el útero se abre camino, variando la estática de las demás visceras abdominales. Este hecho suele producir dolor abdominal y costal. También es común un aumento de la frecuencia de las micciones, ya que la vejiga queda comprimida y su volumen se reduce.
Tras el parto, el útero tarda alrededor de 6 semanas en volver a su tamaño y posición original. La involución uterina se produce gracias a los entuertos, que son contracciones uterinas que ocurren durante el puerperio. Estas se ven facilitadas si hay lactancia materna gracias a la oxitocina. Con los entuertos también aparecen los loquios, que son un sangrado vaginal postparto que aparece hasta la quinta semana del puerperio.
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