¿Has tenido recientemente una cesárea y tienes molestias en la cicatriz?
Durante los primeros días después de que te quiten los puntos, pueden aparecer algunas molestias: picor, escozor, rojez, tirantez o dolor por el roce de la ropa. Es entonces cuando pueden surgir ciertas dudas sobre cómo podemos aliviar estos síntomas y acelerar el proceso de cicatrización.
La cesárea y su cicatriz
Los partos por cesárea se realizan por razones médicas cuando se detecta sufrimiento fetal o existe algún riesgo en el parto vaginal para la futura mamá o el bebé. Desgraciadamente en España el número de cesáreas es mucho mayor del que recomienda la OMS.
Para muchas madres, la cicatriz de la cesárea se convierte en la huella de uno de los momentos más importantes en la vida: la llegada de su bebé.
La cicatrización de la piel es un proceso lento que dura hasta dos años y que consta de diversas fases. Al principio, durante la fase de proliferación, la cicatriz se presenta roja e inflamada y a medida que pasa a la fase de maduración, ésta toma un color más homogéneo y las molestias van desapareciendo. Durante este proceso, se pueden presentar algunos problemas de cicatrización tales como adherencias, picores, escozor en la zona incluso se puede producir una formación excesiva de tejido cicatricial, generando lo que conocemos como cicatrices hipertróficas o queloides.
Cómo mejorar la cicatrización
Para mejorar este proceso y prevenir la aparición de problemas en la cicatrización, solo hace falta seguir unos sencillos pasos:
- Mantener la cicatriz limpia. Hay que lavarla únicamente con agua y jabón.
- Hidratarla en profundidad.
- Masajearla para evitar adherencias.
- Protegerla de los roces con la ropa que pueden estimular el crecimiento de tejido excesivo.
Existen en el mercado varios productos que se pueden utilizar para mejorar el estado de la cicatriz. Uno de los más completos y avanzados es el kit para cicatrices post-cesárea Askina® C-Section por su exclusivo tratamiento doble, que hidrata y protege la cicatriz. Incorpora el uso combinado de un gel con ácido hialurónico y unos apósitos especialmente adaptados para la cesárea.
El gel nos permite masajear la cicatriz a la vez que la hidratamos y los apósitos la protegen de los roces y previenen la aparición de las temidas cicatrices hipertróficas y queloides. El tratamiento se realiza desde que te quitan los puntos y dura entre 3 y 6 meses. Su uso continuado te proporcionará un alivio de las molestias como el escozor y la tirantez y asegurará la buena evolución de tu cicatriz.
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