Comienzo una nueva semana, ya llevaban unos quince días hablando sobre el coronavirus por los medios de comunicación pero que lejano lo veía. Empiezo a dar las clases y parece que todo aquello no nos va a llegar, ¡que ingenua! Y en dos días todo cambia y la cosa se pone seria; estamos ante una pandemia mundial que nos va hacer cambiar muchísimas cosas. Me despido de mis clientas y comenzamos una nueva etapa de adaptación al mundo online.
Sabía que este año iba a ser muy especial, estoy embarazada, mami y autónoma de un negocio que lleva poquito tiempo en activo. Incertidumbre, cómo muchas mamis y mujeres en mi lugar, de cómo iba a organizarme durante el tiempo de gestación trabajando. Lo que nunca hubiera imaginado es que el mundo se iba a parar y me iba hacer ver todo desde una perspectiva totalmente distinta.
Tengo la gran suerte de vivir en Alcorisa, pueblo de la Comarca del Bajo Aragón, zona privilegiada en los tiempos que corren, puesto que aquí el coronavirus aún no se ha manifestado. Ciudadanos responsables a cumplir las normas que nos marcan las autoridades pertinentes a pesar de saber que las zonas urbanitas poco o nada se parecen a nuestros pueblos. Si, digo suerte porque estoy me siento segura, sé que a las mamis gestantes se nos consideran grupo de población de riesgo pero yo me veo fuerte y creo que cumpliendo todas recomendaciones y cuidado que se nos exigen no tenemos por qué tener miedo.
Salgo a comprar, necesito que me dé el aire. Soy una mujer inquieta, nuestra vida nos la han parado y nos tenemos que adaptar, entre mi pareja y yo nos turnamos para hacer esa compra semanal. La gente al verme me pregunta que si no estoy preocupada por mi estado, creo que ante todo hay que estar con calma, leer y escuchar noticias que transmitan información y tranquilidad, cómo se dice por aquí, si siendo cauteloso y acatando las medidas te “pilla el toro” habrá que tomar medidas pertinentes, mientras tanto, ¿por qué voy a ser más vulnerable que los demás?
Claro que la actividad sanitaria ha restringido determinadas visitas. Las consultas con la matrona son vía telefónica (salvo las necesarias e imprescindibles) y la visitas al hospital se han reducido a las indispensables. Nos llevan el seguimiento vía telemática y si tenemos cualquier urgencia ellos nos indicaran si debemos acudir al hospital. Porque no debemos olvidar que siguen cuidando de nosotras.
He de reconocer que hay mamis que pueden echar en falta determinadas actividades cómo pueden ser las clases de preparación al parto. Desde MAMIfit seguimos acompañándote tanto en el embarazo como en el posparto (etapas muy especiales a la vez que complicados en la vida de la mujer). Hemos adaptado nuestros servicios a la vía online para ayudarte y seguir a tu lado y hemos ampliado el abanico de profesionales del sector: matronas, ginecólogos y fisioterapeutas y entrenadoras especialistas en suelo pélvico, que ofrecen aún más calidad y rigor al servicio que prestamos. No estamos solas.
Estamos ante un virus novedoso, no digo nada que no sepamos, falta mucho por hacer, actualmente los poquitos estudios que hay nos dicen que si una mami embarazada coge el covid-19 no se transfiere al feto, aún así recalco que falta mucha investigación por hacer. A mí esta información me da tranquilidad, ¿el truco? Alimentarse bien, se está insistiendo en qué ahora es cuándo debemos reforzar nuestro sistema inmunitario, así que manos a la obra, tenemos un “poquito más de tiempo” así que nos podemos mimar y comer aquellos alimentos que nuestro organismo realmente necesita. Mantenerse activa, tengo la gran suerte que he podido adaptar mis servicios al modo online, súper agradecida por la respuesta de todas mamis por seguir conmigo al “pie del cañón” por lo que el poder seguir trabajando y beneficiándome de todos aspectos saludables que ofrece el entrenamiento físico y el deporte me hace sentir fuerte frente al virus. Y mantener un buen descanso, no os voy a engañar, es lo que más me cuesta, entre que la barriga que crece y que no me siento tan cansada físicamente hay días que me cuesta conciliar el sueño, pero no por ello hay que perder rutinas que favorezcan el poder alcanzarlo.
Soy una mami más entre muchas que estaréis en mi situación y ojalá mis palabras puedan ser mensaje de calma. Reconozco que hoy en día existen multitud de familias que por sus circunstancias lo tienen más difícil, pero tenemos la suerte de vivir en la era digital, y lo sé, no es la misma cercanía, pero es hora de hacer buen uso de ellas y apoyarse para intentar que esta situación sea más fácil de llevar. Debemos cuidarnos, apoyarnos en la familia o en esas personas con las que convives, aprender a priorizar, porque el estar en casa y tele trabajar supone más estrés y cansancio psicológico, mimarse o intentar buscar ese ratico para nosotras mismas, tarea en ocasiones compleja pero no imposible (ya sea para hacer deporte o hacerse las uñas), y sobre todo, tener una actitud positiva porque esto, entre todos, lo vamos a conseguir. Cuídate para poder cuidar, ahora más que nunca.
